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Aquí nos tenéis a los tres" pipiolos"en las escaleras de ese López de Vega donde algún mal que otro rato pasé, con aquellas tres hermanas, tres eran tres las hijas de Elena:
doña Luisa, doña María, doña Isabel. Tres solteronas amargadas que sólo favorecían a quienes ya eran favorecidos, de sección femenina las tres... Lo único bueno que recuerdo de ese tiempo era los botellines de leche que nos daban todas las tardes y los desayunos de chocolate con churros que nos daban el día de la primera comunión. También me acuerdo de los platos de higos chumbos que se metía en clase, entre pecho y espada, doña Avelina, otra impresentable y el frío que pasaba en el cole mientras estas pedorras tenia un buen brasero de picón debajo de sus piernas....
Recuerdo que por aquella época, mi prima Maritere hacia sustituciones cuando algún profesor estaba enfermo y entonces me llevaba a su casa a comer, me encantaba ir a casa de la tía Francisca con sus albóndigas, con tomate que eran las mejores, y las migas con café, que mas de una vez comí en su casa, y en esa cocina que me encantaba, con los muebles de rejilla y el patio lleno de plantas y esa azotea. Todo estaba siempre tan limpio. Yo estaba encantada de que mi prima me llevase a su casa. De la prima Maritere me encantaban sus uñas, las tenia siempre largas y maquilladas.
Bueno os voy a dar una exclusiva ... Por fin vais a saber quien es el niño de gafas de la foto de la feria.
Pues bien se llama Miguelito y es el sobrino de Carmela la vecina de la abuela Sole, todas la conocéis no?
